Crónica y fotos del concierto de Ramoncín (04-03-2022 Teatro Barceló, Madrid)

Redaccion 14/03/202214/03/2022 1 comentario 2022, Conciertos, Dámaso Caminero, Juana López Girón, La Cita Producciones, LOS ELÉCTRICOS DEL DIABLO, Ramoncín, Rock, Teatro Barceló

Cita con los orígenes

Cuarenta y cuatro años después de que Ramoncín presentara su primer disco en el Teatro Barceló (exactamente el 08 de Febrero de 1978), volvía al mismo recinto para reencontrarse con su público que tanto le añoraba después de esta terrible pandemia y sus consecuencias, las cuales no sabemos hasta cuando permanecerán entre nosotros.

Para un servidor, una sala como ésta en la que hemos visto grandes actuaciones como la de Rafa Martín o la de la americana Beth Hart, es una de las mejores de la capital en cuanto a dimensión del escenario, acústica, sonido, ubicación y óptima visibilidad se refiere desde cualquier parte donde te sitúes. No había disco nuevo, pero la ocasión era especial y tanto los músicos como el público fueron conscientes de ello, abarrotándola y consiguiendo un gran ambiente y complicidad.

Ramoncín salió acompañado por LOS ELÉCTRICOS DEL DIABLO que formaban con Gus Martín a la guitarra, Juan Carlos Moya “Jota” a la guitarra, Gabriel Abril a la guitarra, mandolina y “cacharritos”, Charley Gonzalbo al violín y a la guitarra, Miguel Jiménez al bajo, Jesús Varas a los teclados y Luis García a la batería, una banda imponente que sonó perfectamente empastada, sin mácula, que disfrutó sobre las tablas y supo llegar hasta nosotros.

La salida de vocalista y músico al escenario se produjo con unas palabras dedicadas a la tragedia que está asolando a la población ucraniana: “Paz en Ucrania y libertad en Rusia”, las cuales recibieron merecidos aplausos para a continuación meterse en faena con la enérgica “Putney Bridge”, pudiendo todos comprobar que estaba a gusto y que la noche pintaba muy bien, tal y como así fue.

Tras “Déjame!” llegó “La chica de la puerta 16” y salió de nuevo su lado reivindicativo al comentar: “Las chicas no pertenecen a nadie, algunos no se han enterado todavía”. Con la pausada “Blues para un camello” tiró de armónica para dar su toque personal y sentido sin que faltaran canciones emblemáticas como “Reina de la noche” de su disco Arañando la ciudad, la maravillosa “Como un susurro” de La vida en el filo, “Rock and roll Dudua” de su época primigenia con W.C. o “Forjas y Aceros” incluida en Fe ciega, en la que Ramoncín se colgó la guitarra (en ese momento había 5 guitarristas sobre el escenario) de la que todavía nos quedan recuerdos de cuando sonaba en el desaparecido programa Tocata, aquellos añorados tiempos en los que había programas musicales en televisión y en horarios de máxima audiencia.

“La cita” es sin duda una de las canciones que mejor funciona en directo, consiguiendo que el público se venga muy arriba, si es que ya no lo estaba de antemano y seguir así con el sonido de la armónica que precedió las primeras estrofas de “Estamos desesperados”, la cual los seguidores cantaron de principio a fin. Ese “núcleo duro” de fans, como el propio cantante los califica y en el que tengo muy a gala militar, junto a los que acuden por primera vez a su encuentro, son los que consiguen crear esa atmósfera tan maravillosa en cada show que ofrece el músico madrileño, quien ha hecho un pacto con el diablo para conservar su estado físico y su voz de una forma tan envidiable.

El momento álgido de la noche llegó con “Al límite”, la cual contó con invitados especiales como Jorge Escobedo (SÔBER), Paco “Stanley” pintado a lo Paul Stanley, traje y taconazos incluidos tal y como suele vestir en su tributo al miembro de KISS y Kike Ruiz, a quienes pudimos tener y ver a la vez sobre el escenario gracias a la importante ventaja de la amplitud del mismo.

Tras una breve retirada, “Hormigón, mujeres y alcohol” puso un gran colofón a otro brillante concierto de uno de nuestros rockeros más queridos, quien entrega el alma en cada actuación, se mezcla con el público para sentir su cercanía y sabe transmitirnos esas magníficas vibraciones que no se pueden expresar con palabras y que hay que experimentar asistiendo a la liturgia de sus espectáculos.

Set list:

“Putney Bridge”

“Déjame!”

“La chica de la puerta 16”

“Blues para un camello”

“¡Hola muñeca!”

“Reina de la noche”

“Cuerpos calientes”

“Veneno”

“En el infierno”

“Como un susurro”

“Bajando