Crónica y fotografías del Rock Imperium Festival 2024 (19, 20, 21 y 22 de junio en Cartagena, España)
Son muchas las sensaciones y emociones que sin duda se mezclan e invaden un Festival de Rock & Metal pero lo vivido durante las cuatro jornadas en el Rock Imperium de Cartagena, ha superado sin duda las mejores expectativas ya de por sí muy altas para convertirse esta tercera edición en un número redondo tanto en la afluencia de público como en la calidad de los grupos que habiendo sido siempre muy alta, los pasados días 19, 20, 21 y 22 de junio del 2024 alcanzaron e hicieron alcanzar a todos los allí presentes la gloria dentro del rico e inagotable género que es el Heavy Metal.
La variedad musical fue equiparable a la variedad de nacionalidades tanto sobre los escenarios como en el césped donde cada grupo fue esperado, aclamado, ovacionado y aplaudido hasta la extenuación de muchos seguidores y nuevos adeptos a las formaciones que representaron sobre la tarima el pasado, presente y futuro del imbatible Metal que tantas pasiones despierta.
El miércoles 19 arrancó con mucha expectación frente a los escenarios Estrella Levante y Cartagena como desafiantes protagonistas que contaron sobre su tarima con los neerlandeses del Metal Alternativo BLACKBRIAR abriendo seguidos por los finlandeses TURMION KÄTILÖT y su Metal Electrónico fusionado con Black Metal, un exquisito Hard Rock a cargo de los suecos ECLIPSE, el Rock norteamericano de EXTREME e IN EXTREMO desde Alemania con su elaborado Folk Metal cerrando la primera jornada no sin antes habernos despachado con con tres grandes como son RONNIE ROMERO, URIAH HEEP y JUDAS PRIEST.
RONNIE ROMERO puso patas arriba el Estrella Levante Stage a una hora complicada por el calor como son las 16:20, demostrando durante 60 minutos esa raza vocal que le caracteriza pues junto con su nueva formación que lideró como un auténtico cicerone contando a las seis cuerdas con José Rubio, afianzo un repertorio que hizo guiños a su nuevo disco.
Too Many Lies, Too Many Masters vio la luz en 2023 y adquirió protagonismo en el directo con los cortes “Castway On The Moon”, “I’ve Been Losing You” y “Vengeance” dejando claro con ellos, la imparable contundencia con la que Ronnie gestiona su garganta además del aplomo con el cual domina el show en un espectáculo de esencia Hard & Heavy.
El chileno se despacho sin prisa pero sin pausa con otras de la banda THE FERRYMEN de la que fue parte imprescindible, pulsándose con este variado Set List la versatilidad siempre enmarcada en la elegancia con la que cuenta este carismático frontman de la que hizo gala cerrando su actuación con la coreada “Rainbow In The Dark” de DIO.
URIAH HEEP todavía con luz del día desplegó velas con entrega, empatía, feedback e ímpetu mantenidos durante todo el concierto mostrando tanto fidelidad a ellos mismos como fidelidad a su público haciendo un ejercicio magistral sobre las tablas al ofrecer casta, clase, calidad y voracidad en la interpretación de temas con los que literalmente nos apabullaron.
Difícil no establecer un partido de tenis visual entre mirar a un soberbio Bernie Shaw y a un feliz Mick Box que desde 1969 nos lleva dando alegrías como miembro original del grupo derrochando riffs a la par que sonrisas hacia la gente mientras el ritmo de los teclados de Lanzon, nos embaucaba con sonidos setenteros manifestados inalterables ante el tiempo.
“Rainbow Demon” con más de cincuenta años a sus espaldas y perfectamente conocida por todos desafió a los años y nos trasladó a 1972, descubriéndose el público a sí mismo cantando y revitalizando este clásico que llegó con otros como “Stealin”, “Sweet Lorraine”, “Sunrise” o “Gypsy” desgranándose todas ellas entre speeches de un eufórico Shaw.
Hubo tiempo para temas de nuevo cuño como “Hurricane” que mantiene la sabia de la banda y otras que han envejecido tan bien como “Free’n’Easy”, dejando claro los británicos la deuda que tenemos con ellos como pioneros del género que mantienen genio y figura sin haber sido desmerecidos por los años acuñando tanto cariño como admiración.
JUDAS PRIEST como cabezas de cartel de esta primera jornada despertaron la expectación lógica ya desde que se comenzó a montar su escenario, pues los de Halford no contaron con un telón tapando el Estrella Levante Stage y todos pudimos disfrutar como si de una faraónica construcción se tratase, de la fornida cruz que arroparía desde el techo a los PRIEST.
JUDAS hizo parada en el Rock Imperium como único Festival en España donde presentar su trabajo Invincible Shield que ya había pasado por ciudades como Pamplona, Barcelona y Madrid con el mismo éxito que el obtenido en Cartagena pues los de Birmingham lejos de ofrecer un show esperado, regalaron una explosión de música, luz y color realmente arrolladora.
El caldeado ambiente se incendió con “Panick Ataack” de su nuevo disco y un Faulkner a las seis cuerdas que fue imbatible en los constantes solos además de posicionarse junto con Rob como director de la escena, pues el seis cuerdas no dejó de interactuar con un público que desbordaba la esplanada respondiendo con molinillos a la tremenda puesta en escena.
Arropados por la cruz que pendía presumiendo de colores sobre sus cabezas, el grupo se sintió cómodo sobre las tablas y disfrutamos de un Rob Halford seguro, firme, reconocible e irreductible avanzando repertorio con “You’ve Got Another Thing Comin”, “Rapid Fire”, “The Priest Is Back” y “Breaking The Law” que supuso una apoteosis indescriptible.
Imparables los músicos con una deseada “Turbo Lover” o una ovacionada “Painkiller” y completamente ensamblados doblando melodías ambos guitarristas en “Living After Midnight”, el final más deslumbrante llegó cuando Halford apareció sobre el escenario subido en la moto para dejar claro y así nos pareció que aún tiene mucho que decir.
El jueves 20 tras las actuaciones de apertura a cargo de CELTIAN y XANDRIA en el Cartagena Stage y en el Estrella Levante Stage respectivamente, pudimos disfrutar plenamente en el primero de los californianos CIRITH UNGOL que para nosotros y con permiso fueron la sensación de la tarde.
La actuación de los norteamericanos tenía además el aliciente de ser su único concierto en nuestro país y el último de la banda ya que su disolución es inminente, una noticia triste dada la alta calidad tanto compositiva como ejecutoria de este grupo pionero del Heavy Metal que vio la luz allá por el año 1971 y al que esperamos que la Historia Musical haga justicia.
Volcándose totalmente en un concierto intenso y sin fisuras, los de Tim Baker salieron a por todas con cañonazos del tipo “I’m Alive” para enganchar desde cero con una feligresía pletórica y consciente del momento único que estaba viviendo disfrutando vibrante de los enérgicos “Chaos Descends”, “Atom Smasher” o “Black Machine” desgranados entre otros al calor de un público en conexión con esta apisonadora que abrumó hasta a los más cafeteros.
Cerrando filas para disfrutar de una primera línea tras el psicodélico Stoner de los germanos KADAVAR, llegó otro momento muy esperado a cargo de RICHIE KOTZEN liderando su propio combo en formato trío para regalar a todos los presentes una estela de sus siempre alucinantes y brillantes riffs arrancando los mejores sonidos a la guitarra.
“Losing My Mind” o “War Paint” dieron inmortalidad a un mástil intratable que contó con los adornos vocales a cargo del talentoso KOTZEN que se centró en un proyecto personal muy atractivo tras haberse lucido pretéritamente en exultantes como POISON o MR. BIG sin que este pasado haya pesado en su actual individualismo, respetando al mismo tiempo tanto a estos como a los que mantiene actualmente THE WINERY DOGS.
Con una voz correcta y sin grandes filigranas ni de atrezzo ni escénicas, RICHIE fue afianzando su impronta con “Folled Again” sin excesos coreográficos y con la ayuda coral de bajo y batería en la figura este último de Kyle Hughes para impartir junto con ellos clase al directo, siendo consciente como gran músico de lo importante que es rodearse de los mejores.
“Fooled Again”, “Bad Situation” o “Fear” fueron poniendo acordes a una actuación muy marcada por cambios de ritmo y melodías cadentes que escrutaron cada nota e impidieron pestañear, pues cada uno de los punteos del oriundo de Pensilvania suponían un paso más hacia la perfección de un show sobrio a la par que profundo cerrado magistralmente con la versión “Shapes Of Things” de los YARDBIRDS.
Con el debido tanto respeto como admiración hacia los noruegos TNT centrados en su Knights Of The New Thunder, los inconmensurables AVANTASIA que veníamos de aplaudir a rabiar en otra reciente actuación suya llevada a cabo en nuestro país siempre inigualables en literalmente todos los sentidos y un Power Metal estadounidense de la mano de KAMELOT muy afincando en la mezcla perfecta entre el Prog y el Sinfónico, nos acomodamos lo más céntricos y cercanos que pudimos para alabar musicalmente hablando a ese gigante de todos los tiempos llamado GLENN HUGHES.
El nacido hace casi 72 años en la localidad británica de Cannock GLEN HUGHES al que podemos llamar sin temor a equivocarnos la voz del Rock, deleitó con una garganta de origen divino que en auténtica paradoja ha vendido su alma al diablo a pesar de que como él mismo dice, Dios le dio un don que regala a placer y a raudales a todos aquellos que escuchándole podemos cerrar los ojos sintiéndonos en un auténtico paraíso de registros vocales.
El polifacético y eterno HUGHES llegó al Rock Imperium ofreciendo un Set List basado en los años que pasó en PURPLE actualizando los discos en los cuales estuvo con los legendarios y que son Burn, Stormbringer y Come Taste The Band, tres joyas que defendió con orgullo, fidelidad, honestidad y esa actitud tan cálida hacia el público que siempre le caracteriza.
Cómodo sobre el Cartagena Stage, coronado por una foto de juventud de la época en la que lidió junto a Blackmore con fondo abanderando esa psicodelia hippie plagada de amor que siempre ha arrastrado, pantalones acampanados con detalles florales e intratable con un bajo que manejó a capricho, GLENN se mostró tan cercano como genial y soberbio mientras arrancaba como aperitivo con la homónima al álbum “Stormbringer”.
Homenaje al Burn con “Might Just Take Your Life” de auténtico sabor setentero gracias en parte a unos teclados que fueron protagonistas durante todo el directo aportando ese sabor tan personal de puro sonido PURPLE, pudiéndose disfrutar también de grandes clásicos como la lucida “Mistreated” o la exquisita “You Keep On Moving” que llegaron tras un solo de batería tan de moda en otras épocas permitiendo éste un descanso al vocalista, un consagrado HUGHES que regresó a la tarima retomando los speeches que entre tema y tema se marcó utilizados entre otras cosas para recordar la mítica actuación de la formación morada en el histórico California Jam allá por el año 1974.
La privilegiada garganta de GLENN HUGHES nos dio la estocada final despidiéndose con el “Burn”, un tema que le viene como anillo al dedo y con el que se desató una auténtica locura en la explanada al ser un imprescindible que actualmente sólo defiende él sobre las tablas, suponiendo este final el momento más álgido de una actuación que destiló Rock por los cuatro costados y aunque el músico no era cabeza de cartel, podemos afirmar sin temor a equivocarnos que para muchos sí fue él el elegido.
Las actuaciones en el Festivales Región De Murcia Stage de los cartagineses del Metal Sinfónico ARCHETYPE OF DISORDER y de los murcianos enfocados al Hard Rock LONELY FIRE dieron paso a ARWEN como auténticos señores del Power Metal patrio, un grupo de larga trayectoria que gestionó una intensa actuación marca de la casa donde primaron por derecho propio elaboradas melodías que se comenzaron a descargar sin muchos preámbulos arrancando el grupo con “Hollow Days”.
El tiempo muy medido y respetado por todos los músicos hizo que la banda se centrase en tocar, relegando a un segundo plano introducciones de las canciones para aprovechar así el show al máximo centrándolo en su último trabajo editado de nombre The Soul’s Sentence, mostrando el combo un nivel de ejecución muy alto que caló entre el público muy receptivo a la cuña de riffs desplegada por un guitarreo incansable perfectamente acompasado por la rítmica, mimetizándose la formación con la gente para crear una atmósfera favorable que coreó excepcionales como “Us Or Them”.
Muy reseñable el nivel vocal de José Garrido empastado con unos más que acertados teclados que dieron cuerpo tanto a antiguas con “Dreamland” como a más recientes en el caso de “The Void”, buscando ARWEN headbanging entre los asistentes que pudimos observar cantaron las composiciones de lírica personalista y siempre muy centradas en contar historias cercanas tan del gusto de sus seguidores, quienes vieron saciadas sus expectativas ante una actuación auténticamente redonda.
Cerrándose prácticamente el día salieron a escena los Black/Doom SHORES OF NULL seguidos de los estadounidenses afincados en el Heavy Metal NIGHT DEMON y desde Australia la muestra curiosa de Jazz Metal PLINI, centrándonos nosotros en PRAYING MANTIS anteriores al Black Metal sueco MARDUK poniendo estos un brutal y extremo fin de fiesta.
PRAYING MANTIS siempre serpenteando muy cerca de la NWOBHM no han destacado nunca por ser dueños de grandes éxitos, aunque sí han acumulado durante su extensa trayectoria musical temas con estribillos pegadizos fácilmente reconocibles con melodías recordables que han mantenido a esta banda siempre al pie del cañón y baste con decir que vienen aportando talento desde el año 1977, una década tan jugosa como prolífica en Inglaterra de la que el grupo ha sabido conservar su esencia a la vez que ha sabido ir evolucionando.
“Praying Mantis” y “Panic In The Streets” fueron los disparos iniciales con unos inconfundibles tintes melódicos dejando al descubierto desde el comienzo la calidez que su estilo desprende, apoyándose la banda en unas guitarras muy sinceras a la par que controladas en florituras centradas en mantener un compás rítmico de los temas convirtiendo los músicos las canciones en familiares desde el principio y consiguiendo así, meterse a la gente en el bolsillo desde el primer momento.
El disfrutar de una amplia discografía permitió a PRAYING MANTIS transitar por su historia con grandes composiciones como “Highway” o “Believable” a la par que nos acercaron a la actualidad con “Cry For Nation” o la más reciente “Standing Tall” que sonaron espectaculares, vivas, frescas y nítidas aupadas por un respetable nada resentido por las horas y por todo lo ya vivido que quiso en todo momento arropar a un combo que dejó el listón muy alto quedando muy claro, que no llevan por casualidad más de veinticinco años sobre los escenarios.
El viernes 21 abrieron la jornada, con comienzo de alto nivel que se mantendría durante todo el día al igual que en las dos singladuras anteriores del Festival, los murcianos afincados en el Metal Gótico RAINOVER con segundo disco editado el pasado 2023 de nombre Nox seguidos por PHANTOM EXCALIVER llegados desde el país del sol naciente desplegando un atractivo y embaucador Death Metal Melódico, una actuación que podemos decir ganó muchos adeptos entre las huestes del Rock Imperium calando en un público que ya tenía conocimiento de sus potentes cañonazos pues el grupo ha sido el flamante ganador de la batalla de bandas del Wacken Open Air, llegando tras ellos a la temprana hora de las 16:10 en el Cartagena Stage otro producto nacional en la figura de TETE NOVOA.
NOVOA se presentó sobre la tarima con una impresionante puesta en escena a cargo de una impactante coreografía formada por un conjunto de bailarinas que le acompañaron durante todo el show donde como ya es habitual, también contó con el virtuoso e imprescindible guitarrista Yeray Lopez siempre formando ambos un binomio perfecto para encarar los dos discos en solitario del vocalista enmarcados en su espectáculo Historias Que Cantar. El Show ya presentado exitosamente en Madrid.
El directo sin fisuras transcurrió con composiciones amables no exentas de enérgicas notas aderezadas por la potente voz que gasta el de Pinto como una de las mejores que se pasean por nuestro panorama nacional, desgranándose a la perfección algunas como “Vayamos A Más”, “Parte De Mí” o “Fuego Cruzado” presentadas antes por el cantante siempre muy dado a introducir sus temas con unas palabras acerca de los mismos además de involucrarse mucho y muy cercanamente con el público, animando a éste a participar en el espectáculo para conseguir y siempre lograrlo que sean parte del mismo.
El efectismo escénico no se perdió en ningún momento y es que tanto la trabajada imagen del vocalista como el carisma que desprende este frontman sobre las tablas, son el ingrediente perfecto junto con su garganta para gestionar unos conciertos arrolladores sin ser su actuación en el Rock Imperium una excepción e interpretando además de otras canciones propias como “Techos De Cristal” o “Seremos Tú Y Yo”, la ya habitual en su repertorio “Maldito Sea Tu Nombre” de los queridos ÁNGELES DEL INFIERNO defendida con la garra habitual para poner el colofón final con otra versión en este caso del “We Will Rock You”, cerrando con ovaciones una impresionante actuación que nos mostró a un NOVOA disfrutando merecidamente de un dulce momento profesional.
Sólo podemos decir de NESTOR que para nosotros, ha sido sin duda una de las formaciones que más huella ha dejado en el público pues en auténtico estado de gracia durante toda la actuación, los suecos tuvieron claro desde el principio y así lo transmitieron que habían llegado para dar un puñetazo sobre la mesa pisando fuerte la tarima y confirmando que son una banda compacta, emocionante, vibrante y con una actitud loable.
Se desató la locura en la explanada ya de inicio con “Kids In A Ghost” o “The Law Of Jante” combinándose a la perfección la potente energía optimista que desprendió desde el comienzo el grupo con las notas más melódicas de unas composiciones elaboradas a las que la participación del teclado, aportó una base rítmica impagable a unos temas muy trabajados que tuvieron un sonido poderosamente brillante por no decir excepcional y es que cuando se cuenta con bandas de primera, cualquier detalle va siempre a favor de obra.
Con un vocalista en la figura de Tobias Gustavsson que no paró de moverse sobre la tarima acercándose en pura empatía a todos sus compañeros y compartiendo constantes guiños de complicidad con el público, se desarrolló un directo de pura algarabía tanto sobre las tablas como abajo mientras sin darnos cuenta la formación nos abducía llevándonos a su terreno con otras como “Victorius”, “Stone Cold Ice” o “Caroline” que fueron aclamadas, aplaudidas y acompañadas de voces a coro gritando el nombre de NESTOR.
Muy pocas veces un final presentido nos dio tanta pena pues la adrenalina que estábamos todos viviendo era sin duda una de las inyecciones de fuego y energía del Festival, ya que el concierto entró en un imparable in crescendo donde Tobias nos mostró su calidad registral al mismo nivel que la musical del resto cada uno al frente de su instrumento gestionando un tremendo e imparable show en auténtica montaña rusa de sensaciones manifestadas con los típicos “oe, oe, oe, oe” y petición de bises que no fueron posibles, quedándonos todos con la final “1989” resonando en nuestras cabezas durante el resto del día; sencillamente descomunales.
Avanzaba la tarde ya más generosa en sombra aunque no en temperaturas con los IGORRR, una propuesta diferente que podemos resumir como un Barroco Metal enmarcado en Metal Extremo ideales para los busca talentos y admiradores de lo novedoso, BEAST IN BLACK desde Finlandia en puro y acertado contraste con los anteriores impactando con su Power Metal Melódico activo desde el 2015 y centrarnos, antes de que los dioses SAXON de los que todo lo que se diga es poco y los noruegos EMPEROR afincados en el Black Metal Sinfónico cerraran los dos stages principales, en morir de Metal con los infalibles alemanes ACCEPT.
Con su nuevo disco de nombre Humanoid debajo del brazo y como siempre, los gigantes germanos ACCEPT cumplieron por no decir superaron expectativas contando en esta ocasión con la colaboración nada más y nada menos que de Joel Hoekstra, un excepcional guitarrista con quien tenemos que decir alucinamos en el pasado Monsters Of Rock Cruise 2024 gracias a su matinal Session Bloody Mary siendo éste recibido con aplausos tras ser presentado por Mark Tornillo.
Con fondo de cariz futurista y dispuestos tanto a descargar nuevas entregas como himnos, los teutones rompieron el hielo ante una auténtica multitud de fieles con “The Reckoning” del reciente trabajo antes de que las más esperadas como “Living For Tonite” hiciesen acto de presencia mostrando a un Joel cómodo tanto sobre el escenario como entre sus compañeros que ya más bregados en las filas de ACCEPT, no dudaron en darle cancha en punteos y estratosféricos riffs siempre con permiso de Hoffmann que llevó las riendas de las seis cuerdas.
Tornillo se desenvolvió a capricho tanto sobre la tarima como a la voz entregándose a la actualidad del “Straight Up Jack” y al pasado al echarse inevitablemente en brazos del Metal Heart con la positiva “Midnight Mover” para continuar con energía gracias a “Starlight”, “Losers Anda Winers” y “Flash Rockin’ Man” con un Mark volcado ante el micrófono apoyado incondicionalmente por miles de seguidores que en el caso de esta siempre victoriosa formación, no buscan una especial e impresionante puesta en escena sino que aprecian más la carga de profundidad, aspereza, brutalidad y visceralidad sentimental que sus actuaciones despiertan.Los clásicos del grupo como “Teutonic Terror” o la rápida más speed que nunca gracias a las tres guitarras “Fast As A Shark” junto con la imbatible y épica “Balls To The Wall”, fueron cantadas por miles de almas al unísono que elevaron sus manos queriendo tocar a estos ídolos de siempre que con la noche acechando ya sobre sus cabezas, se despidieron con toda una coral entonando su nombre homenajeando, admirando y agradeciendo su actuación siempre tan bien recibida en nuestro país como reconocimiento al Heavy Metal referente que ha dejado una huella imborrable en nuestros ochenteros corazones.
La procesión de interesantes propuestas en el Festivales Región De Murcia Stage fue inagotable con NYHEM, INVICTI, HARD LOVE, ASTRAY VALLEY, EINAR SOLBERG, NAPALM DEATH y THE RAVEN AGE concentrando nuestras fuerzas en unos puros representantes del Heavy Metal oriundos del Reino Unido de nombre BLITZKRIEG, una banda muy a tener en cuenta por la actuación con la que nos golpearon para una oportunidad en los escenarios principales donde sin duda podrían desenvolver con más ambición su espectáculo.
BLITZKRIEG no sólo nos encantó, sino que nos ha fidelizado para siempre con su actuación en directo marcando la banda en rojo esa línea imbatible de la NWOBHM tan apreciada y siempre excepcionalmente representada en el Rock Imperium, dando opción el Festival a esta banda que tanto ha hecho por ese valorado movimiento génesis del género validado en este caso por la masiva afluencia de público para disfrutar de los británicos.
“Armaggedon” fue su inicial grito de guerra enmarcado en el año 1985 y en esa ola metalera años ochenta de honda pisada tan prolífica para este grupo leyenda, unos jinetes que hicieron los honores a su disco A Time Of Changes continuando con “Hell To Pay” en un auténtico túnel hacia los tiempos dorados del Metal más genuino antes de demostrar que también tienen fuelle para composiciones más recientes como “All Hell Is Breaking Loose”, canción por la que han pasado ya siete años pero cuya escucha nos hace sin duda apreciar como marca de la casa la atemporalidad de las composiciones que desarrolla BLITZKRIEG.
Adalides de la esencia más pura del Metal, su actuación ya forma parte de la historia del Festival y con letras mayúsculas sin que por supuesto faltase uno de los solos de guitarra siempre tan apreciados en nuestro “rollo” pero en este caso con esa sensación a estar en casa al conservar éste el calor, sabor y nostalgia de los que devorábamos en tiempos mozos siendo el mismo preludio a una despedida con vuelta a sus orígenes gracias a “Take A Look Around”, recibiendo BLITZKRIEG un aluvión de merecidos aplausos.
Llegó el temido sábado 22 y decimos temido por ser el último día del Rock Imperium 2024 el cual comenzamos además de con el Rock norteamericano gracias a THE LAST INTERNATIONALE y del infalible Heavy Sleazy a cargo de COBRA SPELL con el Power Metal de LOVEBITES, un pleno femenino llegado desde Japón con un look impoluto de puro blanco y una presencia escénica implacable dominando por completo un poderoso show con flirteos incluidos por parte de la vocalista saludando en el idioma de Cervantes.
El grupo formado en el 2016 por estas jovencísimas niponas convenció, gustó y se ganó el respeto de un público que se metió de lleno en un espectáculo de auténtico Power Metal coronado por fondo de inspiración guerrera oriental en su base y arropado por ciertos tintes de epicidad localizados en estribillos que gozaron de la superioridad vocal de la cantante Asami, una voz fina, limpia y clara muy adecuada para unos temas correctos en estructura y muy enfocados a interesantes partes instrumentales.
El quinteto manifestó durante toda la actuación una actitud admirable de auténtica entrega hacia el respetable que aguantó altas temperaturas al igual que ellas en un acto de estoicismo si a la banda le añadimos el plus de no parar sobre el escenario, ya que sus componentes no pararon de jalear y animar a la gente involucrando a la misma para su participación en los coros de las canciones básicamente centradas en su disco del 2017 Awakening From Abyss con el que bajo nuestra modesta opinión, salieron del papel asignado inicialmente como banda emergente.
Potentes guitarras con depurados riffs y sin exceso de solos, batería muy aparejada con los slaps del bajo y una conjunción de coros imprescindibles para la bis oriental que por momentos lograban las canciones además de la pisada fuerte de ellas sobre la tarima, fueron las claves para que LOVEBITES se ganara el favor de la gente siempre ávida en el Rock Imperium de talentos lejanos que paradójicamente nos hermanen y acerquen más con el Metal que se hace en otras partes del mundo.
Nuestra segunda apuesta llegó con SPIDERGAWD en el Estrella Levante Stage llegados desde Noruega para ofrecernos un Hard Rock rompedor presentado en formato quinteto con mención especial al saxofonista, un virtuoso erigido en el líder de la banda en cuanto a actitud se refiere a los mandos de un instrumento de viento de casi gigantes proporciones con el que además de aportar una excelente base rítmica a los temas, gestionó una puesta en escena activa sin parar de moverse de un lado a otro alentando a la gente para que levantase las manos y en definitiva se involucrase en un espectáculo que en algunos tramos adquirió tintes psicodélicos.
Las guitarras se despacharon con sonidos Hard & Heavy a la vieja usanza y en algunos momentos hasta adquiriendo un cariz experimental rifándose solos e integrando los mismos con el sonido del saxo, un original e impagable elemento sustitutivo de los teclados que arropó y redondeó melodías siendo una nota casi exótica sobre el escenario teniendo en cuenta lo poco o nada que se utiliza este instrumento en nuestro género musical, algo que sin duda hace de su uso por parte de SPIDERGAWD algo admirable por la dificultad de encaje en las canciones formando finalmente parte imprescindible de las mismas sin desentonar ni en estética ni en ritmo.
Energía a raudales y sensaciones setenteras fue lo que nos dejó esta banda con estela a Rock añejo desentrañando canciones como “Your Heritage”, “Ritual Supernatural” o “All And Everything” para acercarse con ellas en ocasiones a un incipiente Stoner con el que tan sólo coquetearon, pues la base del grupo se mantuvo perfectamente instalada en el Metal más tradicional.
El Stoner Rock de GREEN LUNG hizo acto de presencia sobre el Cartagena Stage con contundencia seguido por el Progresivo polaco más elaborado con extensos pasajes instrumentales a cargo de RIVERSIDE en el Estrella Levante Stage, una alternancia de bandas hasta llegar el turno de WARLOCK con la tan querida como admirada Doro Pesch al frente recuperando su sello como extraordinaria, única y carismática frontwoman de la banda que fue reciba con entrega, calidez e intensos aplausos por parte de un público fiel en complicidad con ella durante todo su excepcional repaso a los clásicos míticos de los años ochenta, llegándose así a la muy esperada por nosotros actuación de YNGWIE MALMSTEEN cabeza de cartel en el Estrella Levante casi cerrando el show del día en los escenarios grandes con permiso de THE DARKNESS que en la pradera y en uno de los stages principales, fueron los encargados de dar carpetazo a la noche plagando ésta de grandes y aclamados éxitos.
YNGWIE MALMSTEEN el talentoso, un guitarrista de incalculable valor y valía musical que despierta al mismo nivel tanto filias como fobias entre los metaleros aunque lo que no creemos sea discutible, es su calidad a las seis cuerdas aderezada por su imponente figura y en este caso por un muy acertado juego de luces y humo para entretejer su silueta a veces sinuosa entre sombras, una magistral puesta en escena para arrancar el directo con “Rising Force” interpretada vocalmente por el teclista.
El martillazo sueco se presentó en el Rock Imperium con bajo, batería y teclas encargado este último de interpretar algunos temas aunque debemos señalar que Malmsteen nos hizo varios regalos vocales defendiendo su garganta tanto el “Soldier” como el homenaje a su idolatrado Blackmore con “Smoke On The Water”, percibiéndose en todo momento comodidad en sus gestos ya que no sólo hizo las habituales piruetas de guitar-hero a las que nos tiene acostumbrados sino que recorrió el escenario de un lado a otro para que sus mágicos y firmes dedos sobre el mástil, pudieran apreciarse desde todos los rincones.
Nick Z. Marino al teclado, Emilio Martínez al bajo y Kevin Klingenschmid a la batería fueron los escuderos de un YNGWIE que parecía abstraerse del mundo con cada tema centrándose en un amplísimo repertorio que recorrió con sumo gusto, exquisita elegancia y una paradójica pasión correcta en canciones como “Relentless Fury”, “Now Your Ships Are Burned” o “Wolves At The Door” antes de adentrarse en la versión honrando a Sebastian Bach del “Badinerie” tras la cual desplegó clásicos como “Paganini’s 4th”, “Adagio” o “Trilogy (Vengeance)” que llegaron antes de otro cover en este caso del “Red House” de Jimi Hendrix’s Experience.
Cambiando de guitarra con bastante frecuencia, haciendo piruetas con ella, dejándola vibrar sobre los amplificadores y en general otros tantos malabarismos acompañaron el amplio Set List que desgranó sin mediar palabra, dejando un margen de ausencia sobre las tablas para que el baquetista se marcase un solo antes de ocupar de nuevo la tarima para gestionarse la maravillosa para nuestro gusto “You Don’t Remember, I’ll Never Forget” a cargo vocalmente de un Nick increíble también a los teclados, una interpretación más humana por parte de este virtuoso que cumplió con creces y brillo independientemente de gustos personales.
El Festivales Región De Murcia Stage vio desfilar en esta última singladura a VATICAN SPECTRUM, DARKNOISE, GLASYA, HOLYCIDE, RIOT CITY, TEXTURES, CARCASS e INJECTOR para deleite de la multitud que también abarrotaba ese escenario y en nuestro caso, nos quedamos lo más cerca posible de los últimos para disfrutar de pleno con este grupo oriundo de Cartagena al que desde la presentación en Madrid y en Rueda De Prensa de su inmenso, pulido, detallista y enérgico trabajo homónimo, hemos seguido con interés siendo testigos de la vertiginosa progresión que ha tenido la banda tanto en calidad como en actitud escénica creciendo en nivel al mismo tiempo que sus discos.
El cuarteto arrasó la tarima y a su paso se llevó por delante a todos sus seguidores enamorados de este Thrash Metal no exento de melodía a la par que de auténtica “tralla” adornado por si fuera poco con letras potentes, sentidas e incitantes que encajan perfectamente en unas composiciones de brutales giros materializadas en su último álbum de titulo Hunt Of The Rawhead muy aclamado por crítica y público siendo en definitiva, una apuesta por la sangre joven que cree en lo que hace además de practicar una constante evolución siempre in crescendo.
“March To Kill”, “Into The Black” o “Rhythm Of War” son algunos de los cañonazos que Dani a la guitarra y a la voz, Dany B a la segunda guitarra, Maffy al bajo y Juanjo a la batería regalaron de forma inmisericorde sin parar de moverse sobre este stage que se vino abajo en un concierto épico y en una actuación sublime de esas a las que nos tienen acostumbrados ya que desde luego no es casual, que la organización haya contado con ellos tras caerse TANKARD del cartel por motivos de salud.
INJECTOR despidió definitivamente esta tercera edición del Festival y como si fuese su concierto una premonición, queremos pensar no sólo que los veremos el año que viene sino que su brutal fin de fiesta augure los mismos fastos para la próxima cuarta edición ante la cual ya estamos todos expectantes.
Vaya desde esta líneas nuestro agradecimiento a la organización y nuestra más sincera enhorabuena para todo el staff que conforma el Rock Imperium, ellos son sólidas piezas de un engranaje perfectamente engrasado que culminó en un éxito rotundo donde la cordialidad, la hermandad, la camaradería y sobre todo el amor por la música fueron las notas predominantes en un Festival sin fisuras que desbordó Metal en sus tres stages donde la potente iluminación y el poderoso sonido, fueron también imprescindibles protagonistas.
Crónica y fotografías: MIGUEL ÁNGEL PRÍNCIPE