Crónica, fotografías y vídeos del concierto de IRON SAVIOR y AIRBORN (08-12-2022 Sala Rockville, Madrid)
El Metal en estado de gracia, con doblete internacional y mucha veteranía sobre el escenario, se enmarcó de la mano tanto de Kivents como de Hueso Producciones dentro del Skycrest Tour Spain 2022, un evento que subió al escenario de la madrileña Sala Rockville el pasado 08 de diciembre a dos formaciones que fidelizaron un Hard de corte Power Metal para AIRBORN y con tintes genuinos de Heavy Metal para IRON SAVIOR, dos grandes bandas llegadas desde Italia y Alemania respectivamente que supieron crear atmósfera y dar brillo a una velada en la que no faltó un intenso repertorio del que ambas iban sobradas, consiguiendo con él establecer una palpable química tanto dentro como fuera del escenario.
Apadrinados en sus comienzos por el propio Piet Sielck, de quien aún resuenan aquellos iniciales ecos en GENTRY, con una trayectoria extensa en años y fructífera en discos, siendo el último editado Lizard Secrets: Part Two – Age of Wonder que vio la luz hace ahora un año a través del sello Fighter Records, el cuarteto AIRBORN fue el encargado de abrir el show ante un público ya nutrido y deseoso que ocupó desde el comienzo las primeras filas de la arena con altas expectativas y ganas de headbanging, propiciándose un clima perfecto cuya responsabilidad fue entendida por los de Turín que rompieron el hielo con “Hero”, un tema que ya ha hecho de obertura en otros directos y que nos remontó, en una Rockville con generosos focos y sonido nítido durante ambas actuaciones, hasta el primer álbum de AIRBORN, quienes mostraron un gran interés por recalcar su identidad ante posibles confusiones con los australianos AIRBOURNE, diferencia nada baladí y que ellos mismos señalaron durante un concierto que contó con unas palabras en castellano del vocalista Alessio Perardi aunque no tardó mucho en volver al inglés como lengua vehicular.
“Terrifying Manhunt” puso en marcha la maquinaria más Power con una gran presencia del baterista, quien aferrado a un bombo de diseño con el nombre de ambas formaciones como bandera no desperdició ocasión en mostrar unas baquetas veloces y contundentes no exentas de ciertos malabares, las cuales se lucieron durante todo el directo como una excepcional base rítmica junto con una solidez que afianzó los paradigmas propios del subgénero, deleitándonos el grupo en éste y sucesivos como “Who We Are” del redondo Lizard Secrets, “Reign Of The Human Race” o “Wolf Child” en la velocidad propia del estilo con detalle en los arreglos melódicos y una técnica instrumental muy depurada a la vez que accesible, marcándose estribillos con gancho para unos temas que Perardi aderezó en todo momento con speechs entre canción y canción exponiendo tanto anécdotas como significado de las letras que se sucedían para meter al público al máximo posible en el show, algo que consiguió tirando también de humor como cuando señaló que su español se debía a la lectura de cómics como Mortadelo Y Filemón, lo que despertó las risas entre un respetable que se mostró agradecido con el interés de AIRBORN por crear cercanía.
Si tal vez el comienzo de los italianos pareció algo tímido con un Alessio no muy prodigado en registros, el vocalista fue cogiendo potencia y seguridad sobre las tablas ya con “Here Comes The Claw”, tema donde la base rítmica esta vez del bajo de Domenico Buratti se puso de manifiesto dejándonos elegantes toques de calidad que combinó con unos coros trabajados y agilidad escénica al ser el más activo dentro de la misma, creándose un impasse que dio paso a una actuación más dinámica con una mayor involucración por parte del seis cuerdas solista y una explosión de grupo conjuntado que hizo gala de buen sonido, elaboración interpretativa y elegancia en la gestión de temas con melodías fuertes como en “King Of Fear” o “Troubles”, ambas ejecutadas con ciertos toques épicos muy cercanos a himnos que fueron coreados por todos los allí presentes quienes también se adentraron con facilidad en el brillo de grandes como la muy coreada “Metal Haters”, la cual representa esa línea de guitarra tan perfilada propia del Power que arrancó notas radiantes y melodiosas muy bien acogidas por un público mimetizado a estas alturas con AIRBORN, quienes agradecieron la colaboración tras unas poderosas “Projectile” y “Born To Fly” con las que se salieron de un machacado, potente y exitoso Live Animals ya con una presencia escénica más sólida y mayor sensación de combo para cerrar su espectáculo de unos cuarenta y cinco minutos con el clásico de JUDAS “Metal Gods”, una elección perfecta para despedirse de una ciudad que nunca había pisado la banda y dejar en el público sensaciones de repetir tras despedirlos con aplausos y ese sabor a redescubrimiento.
Set List AIRBORN : “Hero”, “Terrifying Manhunt”, “Who We Are”, “Reign Of The Human Race”, “Wolf Child”, “Here Comes The Claw”, “King Of Fear”, “Troubles”, “Metal Haters”, “Projectile”, “Born To Fly” y “Metal Gods”.
Tras un breve cambio de backline y un intercambio imprescindible de impresiones por parte de la gente tras lo vivido en el primer directo llegó el plato fuerte de la noche que no por esperado fue menos sensacional, pues las ganas de disfrutar sobre las tablas de estos cuatro jinetes llamados IRON SAVIOR eran muchas y cumplieron su papel por no decir que superaron expectativas, siendo además difícil saber si disfrutaron ellos más arriba o el público abajo valorando aptitud y actitud a partes iguales junto con un sonido impecable que ayudó a los germanos a realizar un buen repaso de su trayectoria musical a través de un repertorio que contó con catorce temas propios y una versión final del “Breaking The Law” (JUDAS PRIEST), un show donde no faltaron canciones de su nuevo disco Skycrest editado en 2020 a través de AFM Records.
Con fuerza y humor ya desde el principio, centrados ambos calificativos en las figuras tanto de Piet Sielck a la voz y a la guitarra como de Jan Soren Eckert al bajo, la sala se vino arriba con un llenazo más que considerable de manos con cuernos al aire y un aroma a metalheads que fue in crescendo durante todo el concierto, creándose una atmósfera de hermandad que los propios miembros de la formación se encargaron de alimentar con una frenética actividad sobre el escenario por parte de Jan, quien no paró de hacer guiños, bromas y slaps acercándose a la primera fila de fans para meter aún más a la feligresía dentro del espectáculo creando continuamente momentos de complicidad con el guitarrista Joachim “Piesel” Küstner, quien en actitud más comedida utilizó una estrategia tranquila, cariñosa y simpática formándose el binomio perfecto que lideró con carisma Piet, cerrándose el círculo con un Patrick Klose que se manifestó intratable a las baquetas durante toda la noche comenzándose a descargar un Heavy Metal intacto con “Way Of The Blade” como toda una declaración de intenciones de lo que allí estaba a punto de acontecer, arrancando así un Set List que no se remontó más atrás de 2010 aunque los SAVIOR tienen cuerda para rato.
Imprescindibles composiciones como la veloz, poderosa y explosiva “Kill Or Get Kill” o la eficaz y definida “Roaring Thunder“, nos dejaron en la retina ya desde el comienzo a una formación más que consolidada que tiró de veteranía y se sintió cómoda sobre la tarima, algo que generó las mejores sensaciones entre ellos y los seguidores quienes no escatimaron en ovaciones y aplausos mezclando estos con los puños en alto mientras el juego sobre las tablas de Jan y Joachim bordó los riffs del segundo, unas ráfagas que se mantuvieron nítidas y brillantes en un adorado término medio en cuanto a duración se refiere y en un alto grado de perfección con combinación perfecta entre solista y rítmica gestionada ésta mayormente por Piet, quien contó como regalo a su ya marcado y grave registro vocal con unos coros fuertes, sencillos y generosos por parte del bajista que arropó en todo momento a sus compañeros centrando en su figura el espectáculo más teatral.
“Souleater” y “Skycrest” nos devolvieron al presente tras los incesantes comentarios de un Sielck en estado de gracia que junto con Soren Eckert, bromeó continuamente entre tema y tema con la misma intensidad en la distensión del espectáculo que en la ejecución instrumental del mismo, pues las afiladas guitarras muy centradas sobre todo para Küstner en la parte media del mástil gestionaron notas redondas, poderosas y con un auténtico estruendo a Heavy que fluyó apoyado en el huracán Klose también para las siguientes “Revenge Of The Bride“, “Hall Of The Heroes” y “Starlight”, tres cañonazos en vivo con unas impagables segundas voces cargadas de garra y muy rompedoras en cuanto al ritmo se refiere, una cadencia mantenida que facilitó la participación de todos los allí presentes admirando la destreza con la que el vocalista manejó la doble faceta de cantante y guitarrista sin perder ni frescura ni poder en ninguna de ellas y en perfecta combinación con las bases que le facilitó el batería, un ritmo concluyente que permitió la gestión de las canciones convertidas en auténticos himnos como el inspirador “Stand Up And Fight” que dio paso a uno de los momentos álgidos de la noche gracias a la épica “Heavy Metal Never Dies”, una composición festiva que apela a la unión y en la que Piet hizo una Wall Of Death de voces entre un público que dividió a derecha e izquierda y que siguiendo las instrucciones del frontman, coreó el estribillo pegadizo siguiendo sus divertidas instrucciones en una fuerte interactuación que mezcló música, humor y locura que la audiencia reconoció gritando en varias ocasiones entre canción y canción el nombre de la banda.
La noche tocaba a su fin no sin antes disfrutar de una excepcional combinación de solos en “Never Stop Believing” antes de que se bajasen los decibelios con la balada “Last Hero”, un tema que disminuyó por unos momentos la adrenalina de la noche antes de que la misma remontase de nuevo con los trallazos de “Gunsmoke” y la curtida cargada de nostalgia “Atlantis Falling”, cuatro composiciones con personalidad que dieron paso a un broche final impuesto por el homenaje a JUDAS a través de su exitoso “Breaking The Law” que llenó de euforia la Rockville, cerrándose así un show exento de grandes efectos o telones que enfrentó cara a cara sin enjaezamientos el Heavy Metal más tradicional, genuino y cargado de esencia.
Set List IRON SAVIOR: “Way Of The Blade”, “Kill Or Get Kill”, “Roaring Thunder”, “Souleater”, “Skycrest”, “Revenge Of The Bride“, “Hall Of The Heroes”, “Starlight”, “Stand Up And Fight”, “Heavy Metal Never Dies”, “Never Stop Believing”, “Last Hero”, “Gunsmoke”, “Atlantis Falling” y “Breaking The Law” (JUDAS PRIEST).
Crónica: MONTSERRAT CALVO
Fotografías y vídeos: MIGUEL ÁNGEL PRÍNCIPE