Crónica, fotografías y video del concierto de JOE SATRIANI (02-06-2023 Sala La Riviera, Madrid)
Cuando media hora antes de comenzar el evento, un portavoz de la sala me confirmó que se habían vendido todas las localidades y teniendo en cuenta quien era el artista en cuestión, supuse que se daban todas las condiciones para ver algo realmente grande esta noche. No me equivoqué.
Earth Tour es la denominación que el guitar hero neoyorkino ha escogido para presentarse con unas actuaciones bastante largas, alternando novedades con sus composiciones más clásicas y mezclando muy bien todos los ingredientes para que el público salga satisfecho de los conciertos.
A las 20:05 horas de la tarde y vestido de negro, apareció en el escenario Satriani con una guitarra violeta y roja bastante llamativa de la que salieron los primeros acordes del “Nineteen Eighty” que a pesar de ser relativamente reciente, tiene el sabor y el estilo de esos clásicos que le encumbraron en los ochenta. El sonido de su instrumento fue muy claro y nítido, casi como el del resto de su banda … bueno, el teclado sonó un poco bajito pero eso es algo a lo que ya estamos bastante acostumbrados. “Sahara” cambió el ambiente con su psicodélico comienzo que se fue tornando en un estilo más melodioso para continuar con su último trabajo gracias a “The Elephants Of Mars”, acompañado éste con el videoclip de la canción proyectado desde una pantalla situada al fondo del escenario como único elemento del montaje escénico y concluyendo el final con un solo espectacular para, tras cambiar a una Ibanez (como todas) roja, presentarnos a la banda: el experimentado Kenny Aronoff a la batería, Bryan Beller tanto al bajo como tras los teclados y acompañándole ocasionalmente a la guitarra Rai Thistlethwayte.
En este punto tocó retroceder 36 años para escuchar “Ice 9” y esto se notó por la acogida de una audiencia con una media de edad que se presta a celebrar lo más clásico de su repertorio.
La primera vez que Rai adelantó su posición y se colgó la guitarra fue en “One Big Rush” y a su finalización, Satriani volvió a cambiar el instrumento optando esta vez por el negro como su indumentaria e interpretar “Blue Foot Groovy” antes de que sus fans rompieran en una cerrada ovación al reconocer “Flying In A blue Dream”, sin duda uno de sus himnos. Seguimos bajando pulsaciones con “Faceless” y tras “Crystal Planet”, Joe Satriani complació al respetable con uno de sus hits: “Summer Song”, con la que nadie se quedó sin corear cada una de las notas de la canción mientras de nuevo se proyectó el videoclip correspondiente donde vimos a nuestro protagonista con algo más de pelo y entre coches de carreras. ¡Ambiente ochentero total!
A las 21:15 horas, Satriani indicó que se iba a tomar quince minutos de descanso, poniendo así fin a una primera parte tan fantástica como rockera en la que Joe demostró estar en un estado de forma excelente.
La segunda parte fue más variada y para empezar, se abrió con un solo de batería tras cuya finalización apareció Satriani con su primera guitarra para meter velocidad gracias a ”Energy”, tema que hizo honor a su nombre para cambiar radicalmente con “E 104 st NYC 1973” incluida en su último trabajo, siendo el título de la misma una dirección de Nueva York muy especial para él ya que guarda relación con su padre.
Continuaron los cambios y ahora le tocó el turno de solo a las teclas para a continuación y tras un nuevo cambio de guitarra, escuchar sonidos más Funkys a través de “Cool #9”, exóticos con “Ali Farka, Dick Dale An Alien And Me” o más experimentales con “Shapeshifting”.
Me fijé llegado este punto en Satriani viéndole cómodo, a gusto, relajado … La actuación estaba saliendo como él quería … o mejor, observándose marcas en sus dedos reflejo de que el guitarrista lo estaba dando todo y sus manos empezaban a sufrir pero no importaba, pues lo estaba disfrutando tanto como la abarrotada sala.
El final del concierto empezó a aparecer en el horizonte y llegó el momento de meter una marcha más, lo que se hizo con un nuevo cambio de instrumento (ahora con una guitarra de color blanco) para deleitarnos con “Luminous Flesh Giants” e intensificando después con “If I Coul Fly”, esa obra maestra en la que se lució al comienzo Satriani quedándose solo en el escenario. ¡Brutal!
El arreón último llegó con lo que el público llevaba dos horas esperando: “Always With Me, Always With You” y la demoledora “Satch Boogie”, que sirvió para que la banda se despidiera en primera instancia de un concierto bien estructurado, con los tiempos muy bien llevados y equilibrio en la elección de los temas … pero volvamos a lo que sucedió ahí arriba llegada la hora de los bises con un par de temas que no fueron difíciles de adivinar: “Crowd Chant” y …. ¡síiiiiiiiiii! … “Surfing With The Alien”, donde de nuevo la sala al completo volvió a corear cada nota de este himno.
Tras dos horas y cuarenta y cinco minutos de comienzo del espectáculo, la sensación general parecía ser que sin duda había valido la pena pagar una entrada por ver esto y mientras abandonaba el recinto no pude evitar pensar … ¿Se puede hacer algo más con una guitarra en las manos? Quizá … sólo quemarla como hizo Hendrix en el Festival De Monterey.
Crónica: FERNANDO SÁNCHEZ
Fotografías y video: MIGUEL ÁNGEL PRÍNCIPE
