Crónica y fotografías del concierto de TRUCKFIGHTERS y KRAZARK (Sala Nazca, Madrid 04/05/2024)

Jose Pascual 19/05/202419/05/2024 0 comentarios KRAZARK, Sala Nazca, Stoner Rock, TRUCKFIGHETERS

Los amantes del Stoner rock tenían el pasado sábado 4 de mayo una cita ineludible en la madrileña Sala Nazca con los suecos TRUCKFIGHETERS y los madrileños KRAZARK, como protagonistas, demostrando la buena salud del género ya que pese a estar la fecha dentro de un largo puente en la Comunidad de Madrid, la sala presentaba un saludable aspecto, con una nutrida afluencia de público.

Los encargados de ir calentando la velada fueron KRAZARK, que se presentaban en formato quinteto con el regreso a escena de Kiara a la misma tras su reciente maternidad, conformando junto a Miguel un perfecto tándem a cargo de las seis cuerdas que dio un juego extraordinario. Apoyado por una potente base rítmica conformada por, Andrés al bajo y Joan en la batería y como no la gran voz y el potente carisma de Esteban. “Ride the hell” era el tema elegido para el arranque con Esteban tirando de megáfono, para enganchar ya desde esos primeros acordes a un público entregado que disfruto de la noche desde el primer momento. La demoledora “Dark city” sonaba a continuación constatando que el juego de las dos guitarras le daban un punto extra al sonido de la banda, que no viene si no a confirmar su evolución y el destacado papel dentro del sonido stoner nacional con un estilo propio en el que sin abandonar el sonido propio del género le dan su matiz personal con melodías marcadas e infinidad de matices musicales, tal y como pudimos comprobar a lo largo de la noche en temas como “Freak show” o el aclamado “Get the fuck out of my face” para despedirse con “Fire flake” dejando un agradable sabor de boca.

Setlist KRAZARK: Ride the hell, Dark city, Freak show, Free my power, Get the fuck out of my face, Fire flake.

Tras un rápido cambio de backline, pisaban las tablas con un mensaje claro desde el primer momento ya con la aparición de Johan Marberg que se sentaba a los mandos de su batería con una camiseta en la que rezaba “I came here to fuck shit up and have a good time” algo así como “Vine aquí para joder y pasar un buen rato”, y la no menos fulgurante aparición de Niklas Källgren (Dango) que lo primero que hizo antes de colgarse su guitarra fue despojarse de la camiseta y lanzarla al publico, para situarse a continuación delante de una impresionante pedalera de efectos desplegada a sus pies. Oskar Cederlman (Ozo) su cantante y bajista aunque algo más comedido tampoco parecía que fuera a quedarse muy quieto a tenor de la cantidad de cinta americana con la que fijaba cada cable y sujeción de su bajo. Tras lo cual solo quedaba prepararse para enfrentarse a 80 minutos llenos de fuzz, riffs pesados y energía al más puro estilo TRUCKFIGHETERS.

Tal y como apuntaban esas previsiones la noche se convirtió desde los primeros riff de “Mind control” en un auténtico torbellinos de potentes y pesados riff acompañados de una no menos demoledora base rítmica, todo ello aderezado por una no menos potente puesta en escena sobre todo por parte de un hiperactivo Dango que no paro quieto un solo segundo sobre el escenario, saltando lanzando patadas, gesticulando y animando a la sala mientras se colocaba al borde del escenario para arrancar despiadados sonidos a las cuerdas de su guitarra para disfrute del público, que no dudo en organizar los perceptivos pogos, e incluso algún osado se encaramó sobre el escenario para lanzarse desde allí, mientras sonaban temas como “Atomic” o “Last curfew”, manteniendo el estilo de la banda con una gran trabajo tanto de Johan a la batería como de Ozo al bajo, no podría afirmar si también a la voz, ya que por lo menos desde mi posición pegada al escenario no logre apreciarla perdida entre los instrumentos. El final llegaba como viene siendo habitual en los conciertos de la banda con el tema que ya se ha convertido en un himno para los seguidores de la misma “Desert Cruiser”.